Cuando Castilla y León estaba anegada por el mar

Por Francisco Rubio.
Publicado en el Ágora de Castilla y León  28-01-2015. Copyright del texto. 

En relación al lugar en que habitamos, hay algunas aspectos de la geografía que no siempre se explicaron bien a la gente joven. Hay algunas realidades actuales, que no siempre entendieron los mas mayores. Por eso y como primer articulo de este Agora de Castilla y León, vamos a intentar contar una historia muy peculiar, de cuando el territorio que hoy conocemos como la cuenca del Duero, estaba anegado por un mar. Si, hemos dicho bien, en lo que hoy es pleno secano, antaño, estuvo la mar salada. 

Podríamos empezar con aquello de que hace mucho mucho tiempo, mas o menos hace unos ... 20 millones de años, en un país muy muy  ..... bueno, el país no estaba muy lejano, mas bien estaba cerca, justo debajo de nuestros pies, a unas decenas de metros de profundidad. Pues eso, que hace mucho tiempo, debajo de nuestros pies, hubo un mar.

Aquel mar no era un mar cualquiera, hablamos de un mar repleto de vida y sobre todo, lleno de bichos con cascara, es decir de esos que van con la casa a cuestas a todos los lados, de esos que llamamos caracolas, bibalvos, amonitas..., vamos lo que hoy conoceríamos como marisco de concha del bueno. 

Aquellos miles de animales, tras una vida mas o menos azarosa por aquello de quien se come a quien, terminaron feneciendo como todo ser vivo que se precie y nos dejaron de recuerdo sus pequeñas casitas. Bueno, en el fondo nos han dejado el hueco relleno de lo que fueron sus casitas. Aquellas conchas de mil y una formas, terminaron enterradas y rellenas del fango de los fondos lacustres. Aquel barrillo endureció en aquellos peculiares moldes de conchas y hoy en día, millones de años después, lo podemos encontrar en muchos lugares fosilizados y tan duro como una piedra.



Para que nos hagamos una idea de como fue la secuencia de los hechos, vamos a mostrar un mapa de la península ibérica en el periodo geológico que se conoce como el Mioceno, hace unos 20 millones de años. Para situarnos un poco cronológicamente, recordemos que los dinosaurios se extinguieron hace unos 60 millones de años, así que 20 no parece mucho. Pero si nos referenciamos a que el homínido mas antiguo que piso Europa fue hace unos 2 millones de años, pues esto ocurrió bastante antes.  


Como se aprecia en el mapa adjunto, en lo que hoy denominamos la meseta norte o cuenca del Duero, estaba ocupada por un mar interior o gran lago, de unos 500 km de largo por otros 500 km de ancho. Lo circundaban las mismas cadenas montañosas que hoy en día podemos apreciar, tanto al norte como al sur, al este y al oeste de la meseta.


La Península Ibérica hace unos 20 millones de años, con su mares interiores

Ese mar casi embalsado, con el tiempo fue buscando su propia salida al océano o ... puede que fuera al revés, el océano con sus bramidos fue abriendo brecha hasta enlazar con ese mar interior. Las dos teorías se barajan como posibles. Lo cierto es que en su extremo mas bajo, al oeste, se rompió uno de los "diques" que lo contenían y el agua empezó a verterse en dirección al atlántico, hasta que aquel mar quedó completamente vacío.

El gran cuenco, a medida que se vaciaba de agua, se iba colmatando de sedimentos de diverso tipo, ocupando prácticamente todo lo que antes era agua

Dado que las lluvias seguían produciéndose de manera profusa en las montañas circundantes, estas generaron una serie de grandes y numerosas escorrentías, que acabaron formando las grandes corrientes de agua o ríos y su correspondientes valles, vertiéndose unos a otros el agua en descenso, hasta terminar desaguando en la gran depresión central que conforma el río Duero y que finalmente arroja sus aguas finales al océano atlántico. 

Perspectiva del antiguo mar o gran lago interior en la actual zona de Castilla y León 

Formación de los valles de los ríos en la cuenca del Duero
por efecto de las escorrentías de lluvias procedentes de las zonas montañosas

Red o Sistema fluvial actual en la cuenca del Duero
Resultado de todo este proceso geológico de varios millones de años, es la cuenca del río Duero que hoy en día conocemos y su gran red fluvial que conforma la denominada Meseta Norte o Cuenca del Duero.

La cuenca del Duero desde su nacimiento en los picos de Urbión  (Soria),
hasta su desembocadura en el océano en la ciudad portuguesa de Oporto.  

Lo mas curioso es comprobar como, de los diferentes terrenos y climas que se han conformado en la evolución y metamorfosis de este gran cuenco, han derivado las diferentes comarcas naturales que hoy conocemos. Su diferente vegetación y fauna han generando a su vez diversos modos de vida y como no, diversos modos socioculturales y económicos a lo largo de la historia y que no son sino nuestras propias raíces. 




Y resumiendo el proceso en tres gráficos
de lo acontecido desde aquel mar, a la actual meseta. 






Comentarios

Entradas populares de este blog

Los BIC en Castilla y León

Festividad de San Antón en Castilla y León

Samhain, Halloween y el día de Todos los Santos en la Peninsula Iberica